Páginas

miércoles, 2 de junio de 2010

Una titularidad más que cuestionable


Por Ander Barroso.-

Víctor Valdés ha dado una lección a los listos que auguraban problemas en la portería de la selección con su convocatoria, al ver "lógica" la titularidad de Iker Casillas, del que se ha desecho en elogios. Con ello, desaparece la hipótesis de los que decían que el portero culé no aceptaría su rol de tercer arquero dentro del combinado español.

Valdés es un tipo realmente impulsivo que sabe convivir en el vestuario por mucho que algunos no hagan otra cosa que mencionar su su extrovertida personalidad. En los últimos años, el guardameta catalán no sólo ha crecido como futbolista sino que también como persona y ser el tercer portero de la selección no va a suponer un problema, como sí que lo era en sus inicios el regresar al segundo equipo tras haber estado tres meses entrenando con el primer equipo.

Sea lo que sea y le pese a quién le pese, Casillas será el portero titular de la selección en Sudáfrica. La magnífica trayectoria del madridista es lo que provoca que no exista debate dentro del vestuario. Su rendimiento en la última década, acompañado de los galones que tiene, hace que nadie se atreva a tambalear su continuidad dentro del once titular.

El porque es simple: Casillas sigue siendo un portero de primer nivel mundial y Del Bosque es consciente que hacer cambios en la portería a dos semanas vista del Mundial no tiene sentido, porque tampoco se debe ser alarmista y decir que Iker está a años luz de Valdés.

Su error en la salida en el primer tanto de Arabia Saudí daba un aliciente más a los defensores a ultranza de Valdés, entre los que me incluyo, ya que en un Mundial la trayectoria es lo de menos y hay que guiarse más por estados anímicos y de forma, dónde creo que el barcelonista está un peldaño por encima de su compañero de posición.

1 comentario: